Los puntos de vista sobre los tatuajes han cambiado mucho en los últimos años. Cuando vuelvo a mi infancia, las “únicas” personas que recuerdo que tenían tatuajes, estaban vinculadas a crímenes o a estar en un mal camino en la vida. Ahora, los tatuajes son piezas de arte y reflexiones de nosotros mismos, pero a pesar de que estamos muy lejos de aquellos tiempos donde las personas estaban siendo discriminadas por sus elecciones, sigue siendo un problema para los que no han roto relaciones con esos estereotipos. La mayor parte de la sociedad lo ha aceptado, pero todavía hay muchas ideas erróneas. Yo tengo seis, aunque hay tres que tengo que pueden contar como solo uno, así que tal vez el número real es cuatro; algunos de ustedes probablemente no sabían que yo tenía ninguno y después de hacérmelos, me hice mucho más consciente de la magnitud de la opinión de las personas sobre ellos. “Vas a tener problemas consiguiendo un trabajo”, me dijo alguien, bien “alguien”, me teñí el pelo púrpura, a mi jefe le encantó y no me despidió… ya tengo un trabajo estable donde no se me margina como empleado por las elecciones que hago con mi piel, cabello o ropa, gracias por ese dulce comentario. “No estas siendo un buen modelo a seguir ” otra persona me dijo… oh, ¿le parece? ¿Soy una criminal? ¿Estuve en la cárcel o he cometido algún acto seriamente grave? No lo he hecho, ¿verdad?. ¿Todo eso porque me hice una hermosa pieza de arte en mi brazo? ¿De verdad?. Aprecio el comentario tan bien intencionado.
