Van varias horas desde que pasó y yo que no entiendo. No podría decir que me siento de x manera, porque es que la realidad yo no entiendo. Cuándo me acuerdo vuelvo y me pregunto: ‘why? why? why y why?’ Me quedo patinando en esta parte. De momento el pensamiento se escapa entre esas cartas de nueva información, y se va.
¿Qué nos hace ser como somos? Así o asá. No es que algo sea bueno y lo otro sea malo, pero es que todos sabemos lo que simplemente no se debe hacer. Mira que llevo años escuchando ‘que no hagas lo que no quieres que te hagan a ti’. De distintas maneras lo dicen, pero basically significa lo mismo. I mean, come on. Luego el pensamiento vuelve.
Es que, ‘why?’ ¿Por qué el decidió decirle eso? ¿Por qué la invito a salir? ¿Por qué le da lo suficiente para que no se termine de ir, pero nunca lo que merece y realmente quiere? y, ¿Por qué ella resiste? ¿Por qué no se cansa? ¿Por qué finalmente no entiende que son migajas? Migajas que pareciera que ni son de él pa’ tirar, que tira hasta sin ganas. De seguro del plato de al lao’, pero de él no son.
¿Y ella? ¿Que le ha pasado en la vida pa’ que sea así? ¿Y yo que le hice? Es que yo no entiendo, tanta prepotencia, tanta hipocresía. Es que, ¿cuan difícil es realmente llevar de la mano la autenticidad? Y, ¿en que momento se nos olvida que somos iguales, que simplemente merecemos respeto como lo exigimos? Pisotear a alguien, solo para sentirte poderoso por un instante, ¿te da algo más que eso? Quisiera que realmente me digan, ¿como se siente? ¿Cual es el reward luego de achicar a otra persona por medio de una acción o una palabra?
Yo de verdad que no entiendo. Hace unas semanas leí ‘Puki’, del libro ‘Ventanas’ de Christian Ibarra. Lloré, #normal 😅 Thing is que ese escrito me abrió los ojos 👀 Somos lo que nos enseñan, somos lo que vemos, somos lo que vivimos. Y quien no piense así… puede ir a tomarse un café conmigo un día y me cuenta, porque realmente me interesa saber.
Volviendo a mi gran descubrimiento. Si somos lo que nos enseñan, ¿por qué mejor no enseñamos respeto, inclusividad, aceptación, empatía, bondad? Si somos lo que vemos, ¿por qué no mostramos delicadeza, honestidad, dedicación, amabilidad? Si somos lo que vivimos, ¿por qué no vivimos con la verdad, con amor, con tacto, con paciencia? Si queremos que el mundo a nuestro alrededor, la manera en la que nos hablamos y nos tratamos cambie, ¿por qué se siguen comportando de la misma manera? ¿por qué le sigues haciendo a una vida lo que no quisieras que le hicieran a la tuya?
La manera en la que tratamos a las personas, afecta. Las decisiones que tomamos hacía la vida de una persona, marcan. Si tu ‘das’ de un lugar de egoísmo, eso nunca florecerá. La vida es efímera; este pensamiento lo pasamos por alto o hasta lo olvidamos del todo. Hasta que nos encontramos frente al precipicio. No hay porque esperar a ese momento para rectificar. ¿Realmente estás siendo la persona que quieres ser? ¿La persona que hace falta que todos seamos?
Tu vida y la mía son una, ¿que tal si nos enfocamos en ser la mejor persona que podamos ser mientras tengamos la dicha de vivir? Ayudemos, sonriamos, agradezcamos todo. Desde el aire, el sol, el alimento, los familiares, los compañeros, los amigos, los colores, las plantas, los animales, las experiencias, las risas, el baile, el agua. Para y mira todo lo que tienes ahora, llénate el corazón, disfrútalo y agradecelo, pero hazlo en actitud.
